Todo lo volvería a hacer de otra forma si me quedara tiempo
Aprendería a amar más allá de mi corazón, de mis manos, de mi boca, de mi piel, quizá con el alma. Quiza no te amaría si fuera prudente y equilibrada, si pudiera pensar solo con la cabeza y no con la sangre, esa que recorre me cuerpo y lo calienta. Aunque hay veces que no sé si es sangre o tinta lo que recorre mis venas y a veces no sé si se contiene y fluye lenta por mi torrente o se derrama por mi piel, porque el frágil tejido de mis venas ya no lo puede contener y hierve dentro de mi y acaba por salir a bordotones por mi boca, por mi piel, por mis ojos y la tinta de mis venas acaba escribiendo tu nombre en rojo intenso y salpicando tu boca.
Sara Gómez Mendiguchia
No hay comentarios:
Publicar un comentario